Por: Íngrid Sandoval* y Jhon Helmuth Ávila**
La población de Soacha el pasado 3 de mayo fue perjudicada en su patrimonio cultural: manos criminales borraron el varón del sol, una acción que en realidad no solo afecta a dicha población, sino a todo una región cundiboyacense, ya que esta pintura rupestre según estudios arqueológicos tiene más de 10.000 años, lo que nos lleva a caracterizarla como un tesoro patrimonial y ubicarla como parte de la memoria dejada por la comunidad muisca que habitó en el lugar. Con lo anterior, surge el siguiente interrogante: ¿La acción realizada para borrar de la memoria el Varón del Sol, solo afecta a los habitantes de Soacha?
Para dar respuesta se desglosará el concepto de patrimonio cultural, brindado por la Unesco en 1989: el patrimonio es el legado cultural que recibimos del pasado, que vivimos en el presente y que transmitiremos a las generaciones futuras. Esto nos lleva a pensar en una herencia colectiva que permite realizar una conexión del pasado con el presente, en este caso el hecho ocurrido contra el varón del sol rompe esa relación, a su vez afecta los procesos identitarios que se construyeron alrededor del mismo con del territorio de Soacha, negando así el derecho que poseen las nuevas generaciones a conocer el legado prehispánico regional.
Según autores del ámbito patrimonial como Ballart Hernández y Néstor García Canclini, mencionan la importancia que el patrimonio cultural posee para los nuevos pobladores del lugar. El primero hace mención del derecho que poseen las nuevas generaciones de disfrutar de dichas herencias y valores colectivos. El segundo, hace referencia que dichas expresiones culturales hacen parte del patrimonio cultural, la cual se convierte en la herencia de cada pueblo.
El reconocimiento actual sobre el patrimonio cultural que realiza un conjunto de agentes sociales, es producto de un tejido social que ha mantenido durante siglos. Con la acción ocurrida el 3 de mayo en contra del Varón del Sol, se ha generado una serie de acciones y discursos más contundentes que nutren la memoria colectiva, permitiendo así una alineación de una colectividad alrededor del patrimonio, llevando a la población a una movilización conjunta para proteger lo que queda de sus legados, dejando un mensaje contundente a la población en general: que no está dispuesta a olvidar el Varón del Sol, que no importa que no se encuentre físicamente ante sus miradas, pero que en el espíritu está renaciendo.
Entonces, el patrimonio arqueológico en el lecho rocoso donde se encontraba el Varón del Sol, da fe y testimonio de la antigüedad de este lugar, brindando a la población indignada un motivo para unificarse y alzar la voz hacia múltiples lugares, evidenciándose de esta forma el potencial arqueológico e histórico de Soacha, lo que lleva a ampliar las redes sociales de esta población encendiendo las alarmas en otros lugares y agentes territoriales, siendo el patrimonio cultural inmaterial interpretado como un recurso discursivo y de acción que está nutriendo en estos momentos una movilización social.
Bibliografía:
BALLART, HERNANDEZ, Joseph. Gestión del patrimonio cultural. 5ta edición. Barcelona. 2010.
GARCIA, CANCLINI. Néstor. Los usos sociales del patrimonio. Junta de Andalucía. 1999
CEFAÏ, Daniel. (2011) Diez propuestas para el estudio de las movilizaciones sociales colectivas. Revista sociológica.
* Licenciada en lingüística y literatura con énfasis en etnoeducación. Magister en estudios sociales
** Licenciado en ciencias sociales. Magister en patrimonio cultural