Los egresados de las universidades públicas tienen la responsabilidad ciudadana de recuperar la universidad pública de la corrupción, el clientelismo y la mediocridad. En Colombia, la participación ciudadana está consagrada en la carta política, lo cual explica los abundantes mecanismos de elección popular que existen. Tenemos los gobiernos escolares en los colegios, los Consejos Locales y Municipales de Juventud y las consultas previas para decidir comunitariamente por el futuro de los territorios, hasta las elecciones parlamentarias y presidenciales que se nos vienen.
Sin embargo, la formalidad de la democracia no es lo mismo que la democracia hecha realidad. Por eso nuestra institucionalidad es sólida y estable, pero corrupta y violenta a la vez, o sino miremos la cooptación de los poderes y los organizamos de control por parte del gobierno y los escándalos de corrupción y abusos de la clase política.
El circo democrático en la U.D
En días pasados tuvo lugar la elección del representante de egresados al Consejo Superior Universitario, donde quedó expuesta la profunda degradación de nuestros mecanismos de participación. De una parte, las votaciones no superaron los 900 sufragantes. De otra parte, la plancha ganadora –que tuvo apenas 335 votos– está llena de prácticas clientelistas y carece del debate académico y político que requiere la universidad pública de la capital, tal como quedó expuesto en los debates que se realizaron. Ante este lamentable hecho, las voces de rechazo por parte de autoridades con altura académica y ética no se hicieron esperar.
En dichas elecciones, el trabajo oportunista de las maquinarias y el clientelismo impidió la llegada de nuevas caras, como, por ejemplo, la candidatura de la profesora Diana Beltrán, quien había denunciado públicamente el detrimento patrimonial sucedido en la universidad por la ineficiencia administrativa.
El pasado 17 de noviembre se llevó a cabo la elección de rector, acontecimiento trascendental teniendo en cuenta los escándalos de corrupción e ineficiencia administrativa que han rodeado a la universidad en el tiempo reciente.
Allí el panorama fue mas desalentador, pues el ganador fue el voto en blanco, con casi el 40% de las votaciones totales. Este hecho puede ser visto como una acto de rechazo y repudio a la manera en que se efectúan los mecanismos eleccionarios en la universidad.
Recuperemos la UPN
El próximo sábado 20 de noviembre se llevarán a cabo las elecciones de representantes de egresados a los Consejos de Facultad y al Consejo Superior Universitario. Para estas elecciones se ha constituido un bloque alternativo compuesto por egresados de distintas disciplinas que hacen parte del magisterio bogotano. Además, son lideres reconocidos a nivel pedagógico, investigativo y comunitario.
Su lema es “Recuperemos la UPN”, un llamado a ejercer con seriedad el mandato constitucional a decidir sobre el patrimonio público y sobre los recursos que todas y todos aportamos con los impuestos que pagamos.
La Hojarasca se une a este proyecto alternativo que trabaja por una forma de gobernanza realmente democrática. Las alianzas representadas en las candidaturas exponen una manera de comprender la política y lo público desde el poder de las comunidades y con la perspectiva de la justicia social.
Para votar debes verificar el documentos en el siguiente link: http://elecciones.pedagogica.edu.co/egresados/
Luego dirígete el sábado 20 de noviembre con tu documento físico al auditorio multipropósito de la calle 72 y ejerce tu derecho al voto.